Descubre Dunfermline con un coche de alquiler
Dunfermline, ubicada en el corazón de Escocia, es un destino apasionante con mucha historia. Como el lugar de nacimiento de Andrew Carnegie y el lugar de descanso final de Robert the Bruce, hay mucho que explorar en esta encantadora ciudad. Sin embargo, ninguna visita a Dunfermline está completa sin un coche de alquiler que te permita moverte con facilidad y comodidad.
Características de conducir en Dunfermline
Es importante recordar que, a diferencia de Argentina, en Escocia se conduce por la izquierda. También se debe tener en cuenta que el límite de velocidad es de 70 mph en autopistas y carreteras de doble carril, y de 30 mph en áreas urbanas, salvo indicación contraria.
Tu coche de alquiler ideal en Dunfermline
La elección del coche de alquiler adecuado depende de tus planes de viaje. Si planeas visitar las Tierras Altas próximas, puede que un SUV sea la mejor opción. Sin embargo, si te quedas dentro de la ciudad, un coche pequeño o mediano sería más adecuado.
Atracciones must-see en Dunfermline
Dunfermline tiene mucho que ofrecer a los visitantes. Aquí hay algunas atracciones que no debes perderte:
- Palacio de Dunfermline y Parque de Pittencrieff: El parque es un hermoso espacio verde en medio de la ciudad y el palacio, aunque en ruinas, sigue siendo impresionante.
- Museo Carnegie: No puedes visitar Dunfermline sin aprender sobre su famoso hijo, Andrew Carnegie, cuya filantropía cambió el mundo.
- Iglesia de la abadía de Dunfermline: Esta histórica iglesia es el lugar de descanso final de Robert the Bruce.
Nafta y estacionamiento
La nafta en Escocia es más cara que en Argentina, así que tenlo en cuenta al planificar tu presupuesto. En cuanto al estacionamiento, hay varios aparcamientos en todo Dunfermline, pero recuerda siempre pagar y mostrar tu ticket.
Consejos útiles para los argentinos en Dunfermline
El clima de Escocia puede ser bastante impredecible, así que siempre esté preparado para la lluvia. Además, la moneda local es la libra esterlina, por lo que necesitarás cambiar tu dinero. Por último, no olvides probar la gastronomía local. ¡El haggis es un plato icónico que hay que probar!
